Empieza agosto y con el lega el calor. En este post te contamos algunos sencillos trucos para mantener tu casa fresca sin tener que usar aire acondicionado.
Hay que conseguir que el aire se mueva. La clave es abrir las ventanas cuando el aire exterior es más fresco.
Hay que evitar que la radiación solar entre en casa. Los podemos conseguir mediante toldos o bajando las persianas.
Otra de las grandes ventajas de la iluminación LED, aparte de su ahorro energético, es que las bombillas no se recalientan. Por el contrario, en las bombillas incandescentes tradicionales, el 80% de la energía se transforma en calor, algo que no ayuda nada si queremos mantener fresca la casa. Utiliza iluminación LED, aunque si consigues encender las luces lo menos posible aún mejor.
Cuando la radiación solar entra por nuestras ventanas esta calienta los muebles y demás objetos expuestos. Más adelante, cuando ya sea de noche, esos muebles permanecerán calientes y radiarán calor. Es recomendable alejar el mobiliario de las zonas más expuestas a la radiación solar e incluso eliminar, durante el verano, los muebles innecesarios. Un espacio más diáfano también contribuye a que el aire circule y tengamos mayor sensación de frescor.
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